La obesidad es uno de los grandes problemas de salud de nuestra época y está directamente relacionada con nuestros hábitos desde pequeños. Actualmente, la obesidad infantil se ha ido agravando y ha traído como consecuencia a adultos más enfermos. Es por eso que es importante atacarla desde jóvenes para evitar repercusiones progresivas con la edad.
La obesidad infantil se diferencia del término “sobrepeso” en la gravedad en la que se presentan esos kilogramos de más y que son incongruentes con la estatura. Muchas veces, es difícil detectarla por el proceso de crecimiento de los niños ya que no todos crecen a la misma velocidad. Además, la herencia juega un papel muy importante y hace más propensos a algunos a presentar este padecimiento.
A continuación, te compartimos algunos hábitos que ponen en peligro la salud de tu hijo y que te recomendamos evitar:
- Exceso de ingesta de calorías con respecto al gasto calórico
- Dieta desequilibrada al consumir alimentos hipercalóricos que contienen gran cantidad de grasas y azúcares, como lo son snacks, bebidas azucaradas o envasados altos en sodio.
- Poca actividad física o vida sedentaria
- Malos hábitos inculcados en el entorno familiar
Recuerda que los niños muchas veces no son conscientes de la importancia del cuidado de su salud y dependen de las decisiones tomadas por los adultos. Por eso ayúdalos a evitar estos malos hábitos y si consideras necesario comienza un programa para bajar de peso, puedes involucrar a toda la familia para que tu hijo no se sienta solo. Empieza fomentando una alimentación y hábitos saludables con estas simples acciones:
- Sirve raciones adecuadas para la edad del niño
- Ten disponibles snacks saludables con verduras, frutas o nueces que puedan quitar el antojo y suplir papitas, embutidos o dulces
- Compra productos bajos en grasa
- Limita el consumo de carnes rojas y opta por comer carne blanca como pescado o pollo
- No compres alimentos ricos en calorías o comidas chatarras que puedan provocar tentaciones
- Fomenta la actividad física. El mínimo de tiempo diario asciende a 30 minutos
- La bebida de elección debe ser el agua. El consumo de bebidas azucaradas como el refresco o jugos enlatados no son recomendados
- Restringe el tiempo que los niños dedican a ver televisión, jugar a videojuegos o a navegar por Internet
